Buenos días, que bien se está en vacaciones y lo que se disfruta en verano, por eso hay que aprovechar al máximo, para los que os vayáis ahora ya sabéis que empieza lo bueno y para los que os quede poco, disfrutarlas al máximo.
Esta semana el artículo versa sobre lo que hay y está detrás de todo lo que adquirimos, quizás nunca nos hayamos cuestionado esto pero debemos ser conscientes, exigentes y respetuosos con el origen de los objetos materiales que compramos.
¿Somos conscientes de la procedencia de las cosas que adquirimos?
Los consumidores tenemos derecho, y también debería ser nuestro deber, el conocer en qué condiciones se fabrican los objetos materiales.
Las grandes empresas por su parte deberían cuidar más su comunicación y ser más transparentes en cuánto a su producción.
Es fundamental que nos informemos al comprar algo de si se ha respetado el entorno y medioambiente, es importante comprobar que cuenta con certificados oficiales, como el sello Made in Green que otorga el Instituto Tecnológico Textil. Garantizar que los objetos materiales no contienen sustancias dañinas para la salud, que se han respetado los derechos de los trabajadores y que la producción no ha dañado el ecosistema, debe ser una obligación de los empresarios y un deber por parte de los consumidores de exigirlo.
No solamente están en juego los derechos de miles de trabajadores, sino los derechos humanos, el respeto al medioambiente o incluso incentivar el empleo en España.
Os parecerá mentira pero realmente con nuestras compras se puede generar trabajo en nuestro país, el famoso Made in Spain, revierte en la creación de tejido empresarial nacional, además de que los productos son considerados por los consumidores de mayor calidad y esto favorece la confianza y la seguridad en los productos nacionales.
¿Es realmente necesario tener tantas cosas?
Está claro que no, os pondré una frase que me encanta y que resume todo esto de una forma clara y concisa. "Nuestra forma de comprar determina el modo de producir y la suma de ambos es claramente insostenible social y medioambientalmente."
Pero lo que si que podemos hacer es ayudar, hay multitud de opciones como donar la ropa o los distintos objetos que ya no usamos, venderlos, reciclarlos, regalarlos o reutilizarlos, vosotros ¿qué preferís?
Es fundamental que todas las empresas respeten los derechos humanos ya que es la base para que funcione cualquier sociedad democrática y en general el mundo entero. Se deben respetar unos códigos éticos, cumplirlos y hacerlos saber para así llegar al deseado bien social.
Hasta aquí el artículo de esta semanita, en poquito tiempo tendréis otro post interesante, hasta el momento vivir intensamente y ante todo ser felices.
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La felicidad nunca llegará a aquellos que no aprecian lo que ya tienen
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